Estamos más abiertos que nunca a explorar. Nos estamos tratando de quitar de encima todas las etiquetas posibles y sencillamente trabajar. El material, el formato, el color, forman parte del proceso y no queremos ponernos límites.

Atlas es un proyecto que hemos comenzado en 2022 y no son otra cosa que mapas, marcan una dirección sobre la que dejar vagar la mente, sobre la que concentrarte, hacia donde ir. Trabajamos sobre diferentes puntos de fuga que en combinación con estructuras geométricas rotundas e inmóviles, nos sumergen en un universo de reminiscencias retrofuturistas, de armaduras, escudos, campos gravitatorios, naves espaciales, jeroglíficos y simbología ritual. Toda esta amalgama de elementos nos invitan a sumergirnos en ellos, tratando de descifrar y encontrar significados ocultos más allá de lo aparente.

Con Atlas estamos trabajando un formato muy concreto para estas piezas, como si se tratase de un mapa de coordenadas. Son obras de 50 x 70 cm. sobre madera, que hemos pintado con spray acrílico. En ellas primero diseñamos las estructuras y su geometría. Trabajamos sobre el papel y en el ordenador, con el fin de ajustar todas las medidas. Cada pieza lleva como mínimo 4 capas de color superpuestas. Para ello utilizamos cinta de enmascarar y vinilo, creando el negativo de lo que queremos trasladar a la superficie. Es un proceso muy interesante ya que hasta que no se retiran todas las capas de vinilo no aparece la obra. Se trata de piezas únicas que se terminan con una capa doble de barniz de alta resistencia.
De estas piezas, que son una serie que continua creciendo, hemos seleccionado una, en concreto la obra ATLAS 06, por su coincidencia con el mes del año en el que estamos y hemos decidido imprimirla en una serie de 20 unidades mediante una técnica de superposición de colores y con un toque manual muy interesante como es la risografía, donde la uniformidad, los acabados y el registro no son del todo uniformes, creando piezas que un toque muy especial.

Hemos seleccionado la pintura #06, ya que sale a la venta en el sexto mes del año, y hemos reproducido la pintura mediante la técnica de la risografía en una edición limitada y firmada de 20 unidades en formato A3.

Se trata de un trabajo que da unas texturas maravillosas y que permite una mezcla de colores muy particulares, con una estética muy retro. El proceso es bastante artesanal, a pesar de tratarse de una máquina.

Toda obra esconde un mensaje, trata de conectar con una parte de nosotros. Tiene por tanto una intención, un lenguaje más o menos definido. El nuestro está en los objetos y en las formas como representaciones, donde la simbología y las formas se mezclan, se confunden, creando ilusiones, sensaciones y abstracción. Es un lenguaje que bebe de muchas partes, todas ellas cargadas de elementos.

Podría ser una realidad imaginada, virtual o alucinógena, perdida en el tiempo,  o procedente de otra dimensión. Cada uno encuentra sus propios vínculos, reminiscencias y conexiones. Nuestra intención es dejar vagar la mente y que la de quien observe la obra igualmente se mueva hacia otros territorios.

Es una simbiosis entre colores, que busca el equilibrio una y otra vez, porque al ser un viaje, o un mapa cada uno debe encontrar su propia representación. Aquí la diversidad de caminos, visibles o invisibles (ya que algunas piezas adquieren otra dimensión al aplicarles luz negra) pretendemos que sea lo más amplia posible.